Nació el descontento ante la ruptura.
La conciencia descubre la miseria,
las necesidades resuelven sus furtivos.
Solo, solo en este vacío que me colma
pronuncio tu nombre que borbotea
-como borbotea-
Reconozco que nombrarte
es lapidar mi alma,
por que ya no figuran mensajes
que envuelvan el sepulcro
donde lo único que existe son mentiras oxidadas.
Invéntate; tus huesos no revelan,
tus manos recorren distancias inalcanzables.
Allí acostado en tu beneplácito escondite
suplicas carne a tu mirada.
No, no quiero absolver tu cuerpo
deseo ser libre para esconderme,
correr -si correr-
envuelta en mi inocencia de vivir
temblando para que mis venas respiren
como aletada que navega firme.
Y ahora miro -te miro-
como blanqueas esa boca que se pudre
cuando suspiras falsedades.
Sunday, November 05, 2006
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment